Encendemos una vela azul celeste cuando necesitamos
fortalecer un afecto o una amistad sincera, se utiliza para
pedidos de unión y de pareja. Ella actúa favorablemente
sobre nuestro sistema nervioso calmando nuestra
ansiedad y protegiendo las vértebras cervicales.
Aclara los estados de confusión y disipa las dudas.
Facilita la comunicación, promueve el entendimiento
y el diálogo entre las personas.
Nos permiten conectarnos con lo nuevo y lo desconocido.
Es ideal para cuando emprendemos algo nuevo, una
relación, un negocio, un viaje o un proyecto.
Moviliza las energías estelares y del mar,
elevando el espíritu y el ánimo.
Evita los fanatismos y los pensamientos rígidos,
cuando queremos calmar un ambiento podemos encender
una vela celeste y generar un clima de confianza.
Para esto colocaremos la vela en el centro de una
mesa con algunos objetos que evoquen al cielo o al mar.
Se la puede asociar con un inscienso de lilas o de patchouli.
Le corresponde el número 6.
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