¿ Quién no conoce a una persona hipertensa ?
Ante la simple observación sabemos cuando la presión está
alta, los ojos inyectados, la cara enrojecida, puede o no haber
dolores en la cabeza o en la nuca, zumbidos y mareos, pero casi
siempre el detonante será emocional.La forma de hablar será
exasperada, se negará a tomar medicación o a ser controlado,
pero se quejará, es muy difícil convivir con un hipertenso,
la persona está conteniendo su ira, pero su cuerpo
grita lo que su boca calla.
Casi siempre los hipertensos se exceden, en el consumo de carne roja,
alcohol, cigarrillos y en los desbordes emocionales, tienden a ser
más agresivos y competitivos, les desvela el control de todas las
situaciones, son personalidades tipo A, suelen ser líderes y muy
activos, pero el costo los lleva a enfrentar siempre un riesgo cardíaco.
Hay familias de Hipertensos, no sé si prevalece lo emocional, lo
culinario o lo genético, pero en estas familias casi siempre los
que padecen HTA son los hombres y las mujeres son las cuidadoras.
Aunque durante el embarazo y el climaterio la mujer que nunca tuvo
HTA puede tener algunos episodios y tiene que controlarlos
Es muy difícil convivir con un hipertenso, porque son altamente
emocionales, iracundos y no les gusta que le pongan límites.
A veces se comportan como tiranos, pero huyen de la reflexión,
son más de acción que de reflexión, por eso la reacción es
tan sanguínea, que se ve a flor de piel, sólo en los ojos.
¿ CUAL ES EL CONFLICTO DE LA HTA. ALTA?
El hipertenso vive la emoción como una "olla a presión",
pero lejos de afrontarlo se evade, tal vez en su trabajo, elude
el diálogo. Sus conflictos los guarda durante demasiado tiempo y
un día estalla. Tal vez no sepa cómo poner límites a una situación
en la que siente invadido. Puede ser que alguien lo haya desplazado
-o se sienta desplazado- del trabajo, o que alguien acapare la
atención de la familia, algo que no tolera. A veces pasa que
un hijo o una hija se muda con su pareja y esto detona un
tremendo malestar que el hombre calla, pero siente que la
CASA HA SIDO TOMADA. Se puede sentir excluído.
Aunque lejos de decirlo se aísla. El necesita ser el centro
de atención de las miradas y el afecto, que devuelve con
bienes o dinero, ya que le cuesta demostrar el afecto, pero
su corazón y sus arterias soportan la presión de su enojo.
En estos casos tomando conciencia del problema, se puede
hablar lo más tranquilamente posible, antes de estallar y
arrepentirse, porque siempre hay post arrepentimiento.
Si la persona ama más a su familia que a él mismo, tal vez
se someta a una terapia o inicie un cambio, no hay que llegar
al límite de la hemiplejía o el ACV, para darnos cuenta que
algo tenemos que cambiar, que las emociones se expresan
con los medios que pueden para que hagamos un cambio.
Es una elección personal, restringirse en el consumo de sal o
mejor excluírla, ya que todo viene con sal o azúcar añadida,
Seguir las indicaciones del nutricionista en cuanto a carne roja.
Revisar el sodio de las aguas minerales y aumentar el consumo.
Conectarse con el placer y valorar a la familia.
Empezar algo nuevo y apostar a una nueva oportunidad.
IMPORTANTE
Evitar el uso del COLOR ROJO, en paredes, cobertores,
cortinas, tanto en el trabajo como en la casa.
Buscar azules y verdes y elegir de qué manera se
quiere sobrellevar esta respuesta emocional que es crónica.